El cultivo de hortícolas exige condiciones concretas de temperatura y humedad relativa para inducir determinados estados fenológicos.
Por ello, su producción en invernaderos es importante para acortar su ciclo y cultivar en periodos en los que el clima no lo permite.
Los cultivos de hortícolas por excelencia son el tomate y el pimiento, seguidos de pepino, calabacín y melón. Aunque podemos encontrar otras hortalizas cultivadas en invernadero.
Cultivo de hortalizas en invernaderos multitúnel
Los cultivos de hortalizas que requieren un clima específico hay que producirlos en invernaderos muy tecnificados, con sistemas de ventilación forzada, sistemas de calefacción y sistemas hidropónicos para la fertirrigación.
Los invernaderos utilizados en este tipo de producción son invernaderos multiúnel tipo capilla, gótico, asimétrico o tropical.
Estos invernaderos realizan un control exhaustivo del clima y aportan las condiciones óptimas para cada estadío fenológico del cultivo.
Cultivo de hortalizas en invernaderos tradicionales
Cuando las condiciones ambientales no son favorables para el cultivo en determinadas épocas del año se pueden utilizar también invernaderos menos tecnificados como los invernaderos parral o plano, invernaderos tipo túnel o raspa y amagado.
Cultivo de hortalizas en invernaderos de malla
El cultivo de hortalizas en invernaderos de malla las protege contra las inclemencias meteorológicas, las plagas y aporta cierta precocidad.
Pero su inconveniente es el control del clima (modifican muy poco las condiciones climáticas y dependen del clima de la zona).
Sistemas de producción
Dependiendo del cultivo que se trate contaremos con los siguientes sistemas
¿Qué invernadero es mejor para la producción de hortalizas?
Desde el punto de vista técnico, para cultivar hortalizas es recomendable la producción en invernaderos de tipo multitúnel, ya que son los que permiten un mejor control del clima y mejor control de las plagas y enfermedades.
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